El legendario gesto de furia descontrolada de el maestro de Marsella en el partido que pondría fin a su brillante carrera permanece grabado a fuego . La prensa internacional evocan con admiración y pesar cómo el ídolo indiscutible truncó su propia consagración al lanzar un cabezazo furibundo a su antagonista en la contienda . A pesar de